Samark López explica como Leopoldo López y Julio Borges participaron en supuesta corrupción de Pdvsa-Cripto

El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, publicó un video donde el empresario Samark López, revela cómo, supuestamente, Leopoldo López y Julio Borges participaron en una trama de corrupción de Pdvsa-Cripto.

En el materia audiovisual, el empresario, quien se encuentra detenido y acusado de ser testaferro del exministro de Petróleo Tareck El Aissami, aseguró que a partir de 2020 y hasta 2022 la jefatura de Pdvsa y parte de su junta directiva continuó asignando petróleo a través de contratistas que estaban ocultos tras empresas españolas, cuyos nombres no reveló.

Sin embargo, detalló que al menos dos contratistas estaban vinculados con López y Borges. “Por lo menos, dos contratistas venezolanos tienen una estrecha vinculación con los partidos Primero Justicia (PJ) y Voluntad Popular (VP)”, manifestó.

El empresario reveló que se utilizaron dos modalidades; la primera asignación de embarques petroleros.

“Se utilizaron distintas empresas, no siempre la misma, los embarques mínimo eran de dos millones de barriles por barco, por un valor aproximado entre 120 y 140 millones de dólares, según el precio que tuviese el mercado”, dijo.

Habló sobre una segunda modalidad. «Se trató de una combinación donde se le exigía a los contratistas en lugar de pagar el precio del crudo, envíen combustible o envían diluente, es decir, envíen petróleo más liviano para ser mezclado y producir petróleo en Venezuela».

Detalló que bajó segunda modalidad los contratistas tenía una ganancia doble «Ganan por la venta del petróleo y también ganan del suministro del insumo», sostuvo.

A pesar de que manifestó que es difícil calcular las cifras de estos embarques, dijo que se podría hablar de más de mil millones de dólares.

El pasado 29 de abril, Saab relacionó también a los opositores Carlos Vecchio y Carlos Ocariz como parte de la conspiración política ligada a la trama de “Pdvsa-Cripto” en connivencia con Estados Unidos y El Aissami.

Fuente: N Digital